Maite Huarte Martínez, nacida el 9 de noviembre de 1974, estudió Biología en la Universidad de Navarra en Pamplona, su ciudad natal. Fue algo puramente vocacional, y tras terminar su grado decidió especializarse y hacer una tesis doctoral en un centro del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CISC) en Madrid sobre el virus de la gripe. Se centró en explicar los mecanismos básicos del virus y en cómo interacciona con la célula infectada. Finalizada su tesis doctoral decidió irse a Estados Unidos durante seis años para especializarse en la epigenética, estudiando en Harvard y en Massachusetts Institute of Technology (MIT). Lo que Maite realmente quería era estudiar, lograr entender cómo es posible que el mismo código genético, la misma secuencia de genes del organismo, se exprese de formas tan diferentes. Hoy en día trabaja en el área de investigación del departamento de oncología del CIMA.
Maite, cuyo interés por su trabajo es fácil de percibir por el gran interés que pone al hablar de él, quería entender cómo funcionan los organismos vivos, los mecanismos básicos, saber de qué estamos hechos, cómo funcionan nuestras células y nuestras moléculas. Hoy en día estudia una parte del genoma humano que hasta hace poco se consideraba como "basura genética", pues no contiene genes que codifican proteínas (moléculas que pueden tener una función). En sus investigaciones se está dando cuenta de que sí que pueden llegar a contener genes funcionales aunque no sean especialmente codificantes de proteínas, y quiere centrar esos descubrimientos en su función en el cáncer. Esa clase de genes diferentes tienen funciones, y cuando estas funciones se alteran, pueden tener, por ejemplo, un efecto en una célula y hacerse cancerosa. Por lo tanto estos genes parecen funcionar como supresores tumorales.
El trabajo diario de Maite es muy variado. Por un lado trabaja en el laboratorio y con estudiantes con diversos proyectos de investigación diferentes. Así pues, discuten su trabajo, piensan nuevos experimentos, o si hay algún problema intentan solucionarlo. Por otro lado, invierte mucho tiempo en la lectura de artículos publicados, así consigue tener nuevas ideas. Al mismo tiempo se dedica a escribir artículos explicando sus trabajos realizados, ir a congresos para presentarlos, discutirlos con otros científicos, intercambiar ideas, etc.
Dentro de sus proyectos más importantes es muy destacable un proyecto europeo prestigioso denominado ERC que le fue concedido. Gracias a este proyecto se le ha subvencionado con millón y medio de euros para trabajar, dinero que emplean para realizar investigaciones anteriormente mencionadas.
Su proyecto futuro está claro, quiere seguir con total firmeza avanzando en estos descubrimientos realizados. Profundizar en ellos, por ejemplo, si estos genes identificados, que tienen una función importante, intentarán ver si hay alguna forma para desarrollar algún tipo de tratamiento o droga para que en el caso de que sean beneficiosos para el cáncer, intentar que estén más activos, o en el caso contrario al revés, si son perjudiciales inhibir su actividad.
Maite Huarte, quien ha invertido gran parte de su vida en la ciencia, además de tener muy claro de qué habla sabe comunicarlo con total libertad, amabilidad y comodidad. Y es que para todos aquellos no especializados en las ciencias, resulta comprensible su trabajo y la explicación del mismo, lo que denota su interés por divulgar la ciencia y que sea asequible para todos.
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